El día que llegué a Holanda estuvo nublado y lluvioso, esto me preocupó, pues yo tenía la esperanza de que iba a gozar de buen clima y en cambio me encontraba con un dia muy inglés. El día siguiente amaneció despejado y desde entonces el clima ha sido una maravilla, hay sol, pocas nubes y puede uno salir a la calle sin sueter. Ademas los dias largos ya llegaron y obscurece cerca de las 10 de la noche, esto ha sido excelente motivo para pasar horas en los cafés, sentado por supuesto en la plaza, leyendo o viendo a la gente pasar.
El curso ha estado muy interesante y he aprendido mucho, después de las quejas populares no describiré el temario, pero baste decir que estamos cubriendo material a una velocidad vertiginosa.
El fin de semana pasado nos fuimos de vagos a La Haya, porque en La Haya hay playa. No es lo que yo imaginaba, empezando por la falta de palmeras, pasando porque no hay puestos de mariscos ni enramadas. La playa estaba llena, no asi el mar, a donde casi nadie se metia, yo valientemente me metí al mar y a los dos minutos tenía las piernas entumidas de frio, arrepentido opté por leer tirado en la arena y dejar la nadada pa' la otra.
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