domingo, noviembre 12, 2006

Nunca tantos problemas

Llegué hoy en la tarde a la casa y puse un poco de ropa a lavar y me senté a ver la tele, todo iba muy tranquilo hasta que escuché un horrible sonido venir de la lavadora, brinqué del sillon y la apagué inmediatamente, no sin antes proferir algunas adecuadas mentadas de madre que provocaron la risa de Chelle. Como tenía miedo de que mi ropa hubiera sido echa trizas, saqué toda mi ropa de la lavadora, la ropa estaba intacta, pero encontré una moneda de dos centavos en el tambor, esto me preocupó porque una moneda perdida podría ser la causa del espantoso ruido; me dí cuenta de que estaba en problemas cuando al girar el tambor de la lavadora escuchaba un sonido metálico, como de algo que se había colado por el empaque y raspaba con el tambor. Esto me preocupó, pero con cuidado giré el tambor unas cuantas veces y el sonido se fue, supuse que esto quería decir que la moneda que se había salido de mis pantalones y colado dentro de la máquina había salido por el filtro.

El siguiente paso fue sacar el filtro (no sin antes provocar (involuntariamente) el derrame de varios litros de agua en el suelo de la cocina). El resultado fue de nuevo preocupante, porque no encontré nada dentro, espere que esto solo quisiera decir que la moneda estaba en camino y para probar la lavadora metí los trapos que había usado para secar el piso, así los lavaba de una vez y me aseguraba de que la lavadora funcionara.

No habían pasado ni 5 minutos cuando un ruido aun más terrorífico que el primero me hizo correr a apagar la lavadora: el tambor estaba completamente atorado y el motor se estaba quejando. Abrí la puerta de la lavadora para ver que pasaba y me encontré con una desagradable sorpresa: una ola de agua salió de la lavadora. Estaba yo tan soprendido que me quedé viendo cómo salía el agua hasta que Michelle me gritó que cerrara la lavadora, finalmente me dí cuenta de lo que estaba pasando y azoté la puerta. En estos momentos la menor de mis preocupaciones era el agua en el piso de la cocina, el tambor y la bomba de agua descompuesta eran bastante graves, sin embargo Michelle esta doblada de la risa en el suelo por mi reacción. La risa es contagiosa y empecé a reirme también mientras Chelle iba por una cubeta para recoger el resto del agua en la lavadora. Una vez que el nivel de agua de la lavadora estaba abajo de la puerta, Chelle empezó a sacar el agua de la lavadora con las manos; ella que parecía tener todo bajo control decidió que la mejor manera de sacar el agua era con la mano!!!, por alguna razón esto me provoco un ataque de risa, lo único que podía pensar era "esto no esta pasando" mientras me carcajeaba en el suelo.

Como no tenía nada que perder volví a sacar el filtro de agua, decidí que un alambre que antes me había parecido parte del filtro era un objeto extraño y lo saque, lo que encontré terminó de hacerme la noche: un alambre de brassiere. Después de otro ataque de risa concluimos que el alambre se había metido hasta la bomba de agua cuando metí el filtro la primera vez y provocó el resto de los desastres.

Si quieren leer una version diferente de los sucesos, dense una vuelta por el blog de Chelle (Chelle cambió de blog, el nuevo esta aqui)